Un poco caro, pero de calidad
El aspecto de la caja es magnífico y la calidad de construcción es de primera.
Utilizada con una tarjeta micro ATX y una 3060ti, todo cabe, a pesar de un cable de gestión algo complicado en la parte trasera. Una vez colocada la fuente de alimentación, queda muy poco espacio para gestionar cables y discos.
El montaje está bien explicado en las instrucciones, siendo el único inconveniente menor que las pequeñas piezas de solicona utilizadas como tapas en algunas de las entradas de cables no se sujetan muy bien y resulta infernal sustituirlas en su sitio.
En cuanto a la refrigeración, las rejillas de la parte superior e inferior de la caja son de tamaño generoso, pero habrá que añadir ventiladores (no incluidos) para evitar el horno.
Modelo: Jonsbo TK-1 2.0 Negro
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