1-HDD / SSD, ¿cuál es la diferencia?
¿Te resulta difícil orientarte entre todas esas complicadas abreviaturas? No te asustes, sólo necesitas saberlo. Ten cuidado, irá muy rápido ;)
Dos sistemas de almacenamiento, dos significados:
• El disco duro también se llama "HDD", que significa "Hard Disk Drive". Por lo tanto, un disco duro y un HDD ¡son la misma cosa!
• El SSD no tiene otro nombre y significa "Solid State Drive".
Bueno, sí, vale... ¿pero entonces qué?
Una vez hechas las presentaciones, podemos ver la diferencia entre sus usos. Porque sí, ambos sirven para almacenar tus datos... ¡pero no sólo eso!
- Se dice que un disco duro es "mecánico", ya que utiliza discos magnéticos para funcionar. Aparte de su avanzada edad (se creó a finales de los años 70), es sobre todo ideal para almacenar volúmenes muy grandes a un coste menor. También se dice que es más duradero que su homólogo SSD, aunque este último es más fiable. Así que no es realmente este elemento el que inclinará la balanza...
- Un SSD utiliza una memoria "flash", integrada en un pequeño chip electrónico. En realidad, esto significa que es más silencioso que un disco duro, pero también que hay menos elementos mecánicos pequeños que puedan romperse. Pero su verdadero interés está en su rendimiento: mucho más rápido, permite acelerar el uso de su PC. También puede ser mucho más pequeño y delgado, pero por otro lado, también es más caro...
Entonces, ¿cuál debería elegir?
De hecho, es muy sencillo decidirlo: si quieres almacenar datos "sencillos", es decir, vídeos, fotos, archivos de Excel, etc., el disco duro será más que suficiente. Podrás almacenar todos sus queridos recuerdos a un coste menor, e incluso podrá asegurarlos con un NAS para evitar que se borren de forma intempestiva. El SSD, en cambio, se utiliza principalmente para los datos "calientes": aquí es donde se instalan los programas y las aplicaciones, el sistema operativo (Windows...) por supuesto, ¡para que se acelere al máximo! ¿El tiempo de arranque de 1 segundo? Sí, eso es gracias (entre otras cosas) a tu SSD.
Atención: ¡una cosa no impide la otra! La mayoría de los PC tienen ambas cosas: un SSD para todo el software y un HDD para el almacenamiento puro. ¿Y si esta fuera tu solución?
2- Sé lo que quiero... pero ¿cómo lo elijo?
¿Te has decidido, o tienes una vaga idea de lo que prefieres, pero te preguntas si encontrarás fácilmente lo que busca (o almacena)? El mundo de la informática puede parecer oscuro, pero en realidad es bastante fácil orientarse: velocidad de lectura, tecnología, interna o externa... unos "pequeños" detalles que decidirán definitivamente tu elección final.
¡Quiero un disco duro!
¿Has decidido almacenar todos tus archivos favoritos a un precio limitado? Esto es lo que tienes que mirar para hacer tu elección:
- El formato
Puedes elegir entre una 3,5" o una 2,5" El más pequeño de 2,5" suele reservarse para los ordenadores portátiles, pero también puede ser una buena alternativa ligera, silenciosa y fiable en una pequeña torre externa que se puede llevar a cualquier parte.
- La capacidad
Por supuesto, esto es lógico, pero hay que determinar el tamaño que se desea. Desde los pequeños 500 MB hasta los enormes 16 TB, las diferencias son enormes. Por supuesto, cuanto más (bytes), más se puede almacenar (unos buenos 2 TB ya son suficientes para una película). Sin embargo, ten en cuenta que la capacidad indicada rara vez es la capacidad real que puedes utilizar. Esos astutos fabricantes tienen su propia forma de calcular...
- La velocidad
A menudo propuesto en 5400 rpm (llamado "verde") o en 7200 rpm (o más), esta medida indica la velocidad de rotación de los discos, y por tanto la velocidad de lectura de los archivos. Por supuesto, cuanto más alta sea la velocidad, mejor... ¡pero a veces más ruidosa!
- Las tecnologías
PMR, SMR, TDMR... tantos nombres extraños que parecen bastante oscuros. De hecho, son tecnologías de grabación que optimizan el tamaño y/o la velocidad de reproducción. No hace falta entrar en detalles: estas tecnologías deben elegirse en función de sus preferencias, pero siguen siendo bastante prescindibles de entender si no se sabe mucho sobre ellas. No dude en consultar la ficha en línea de su disco duro favorito, que podrá explicárselo todo.
- El tamaño de la caché
La memoria caché no es muy famosa, pero permite almacenar los datos "leídos" de tu PC. En pocas palabras: cuanta más memoria caché tenga, más fluida será la lectura y mejor será el rendimiento de tu PC. Por supuesto, todo tiene sus límites... pero es mejor que te hagas con un 32 MB para un uso ideal.
- La función RAID
Debes saber que los discos duros (y los SSD) se pueden unir en lo que se llama un RAID (Redundant Arrays of Inexpensive Disk). Esto le permite optimizar su tamaño, su velocidad o incluso su seguridad, permitiéndole sumar su velocidad, o su espacio, o incluso duplicar los archivos en caso de que un disco duro falle. En resumen, ¡tener varios discos nunca es inútil!
¡Quiero un SSD!
¿Prefieres optimizar el rendimiento de tu software mientras disfrutas del espacio de almacenamiento? Entonces, esta es la mejor manera de elegir tu SSD:
- El formato
Al igual que el disco duro, el SSD puede tener varios formatos, y puede utilizarse tanto interna como externamente (es decir, para llevarlo a todas partes). Algunos modelos son muy finos (mSATA), por lo que pueden insertarse fácilmente en un portátil, pero la mayoría son de 2,5" . Asegúrate de saber cómo se conectan: USB, PCIe, SATAo M.2 para no quedarte tirado.
- Tecnologías y velocidades de lectura
Cuando se trata de conexiones, la tecnología es imprescindible. Antes de elegir su capacidad, la tecnología utilizada marcará una gran diferencia: o bien tu SSD será SATA (y esto ya no está tan mal comparado con la velocidad de lectura de un disco duro, estamos hablando de 550 MB/s en lectura y 520 MB/s en escritura máxima), o bien será NVMe... y ahí, se acabaron los límites de velocidad (¡¡para una velocidad máxima de lectura de 5000 MB/sec !!!). Para esto último, lo ideal es tener una ranura M.2 en la placa base, aunque haya tarjetas de expansión PCIe.
- Capacidad
Los SSD tienen una capacidad de almacenamiento mucho menor, y el precio de los SSD sube muy rápidamente. Así que una de 250 GB será suficiente para un uso "normal" sin gran almacenamiento en ella. Por supuesto, cuanto más tomes, más seguro estarás.
3 - ¿Y los demás?
Por supuesto, las unidades SSD y HDD no son los únicos sistemas de almacenamiento (y afortunadamente así es). Ahora hay toda una gama de herramientas a su servicio para adaptarse realmente a sus necesidades de almacenamiento: para llevar, para asegurar, para conectar en cualquier lugar...
A continuación, un rápido resumen de otros medios que se utilizan más fácilmente en casos particulares:
- Los discos externos: no olvides que un SSD o un disco duro también pueden utilizarse "sobre la marcha" gracias a las carcasas que los protegen eficazmente. Esto permite disponer de una unidad de almacenamiento eficaz que a veces es mucho más grande que una simple llave USB...
- Las memorias USB: inevitablemente famosas, ¡sin duda ya las ha utilizado! El recurso de almacenamiento por excelencia, ¡asegúrate de elegirlos en función de su velocidad de transferencia!
- Servidores NAS /DAS : estas grandes cajas pueden servir para enlazar varios SSD/HDD para optimizar sus capacidades (RAID), transformarlos en servidores multimedia, etc.
- Las tarjetas de memoria : más fáciles de encontrar en tus cámaras o smartphones, las tarjetas SD, micro SD, Compact Flash le permiten almacenar sus imágenes por un peso muy limitado.
- Los servidores en la nube (Cloud): cada vez más asequibles y que permiten conectarse en cualquier lugar, los servidores en la nube son también una solución de almacenamiento. A veces criticados por su seguridad y limitados por tu conexión a Internet, siguen siendo una buena solución si te conviene un sistema de suscripción.