Paul W. Klipsch, pionero estadounidense del audio, fue el creador de un gran número de tecnologías que emocionarán para siempre a generaciones enteras de amantes de la música. Apasionado de la radio y la reproducción del sonido, fundó Klipsch en 1946 para comercializar su primer altavoz totalmente diseñado y hecho a mano, el Klipschorn.
Como un verdadero amante de la música, quería reproducir las sensaciones de una orquesta en vivo en su salón. Hoy en día, el Klipschorn es el producto estrella de la marca y aún se sigue comercializando.
Un gran número de altavoces profesionales se siguen ensamblando, equipando y terminando a mano sin la ayuda de ninguna máquina en su fábrica de Hope, Arkansas. Éste es el sello de calidad de Klipsch desde hace más de 70 años. Con un diseño retro perfectamente dominado y unas prestaciones sonoras impresionantes, la marca sigue estando a la altura de su reputación como una marca excepcional.
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